Al hablar de Transgeneracional hablamos de la historia de hombres, mujeres, niños, niñas con los que estamos conectados a pesar de que vivieron en un tiempo y un espacio diferente al nuestro.

Su historia sigue viva en nuestra historia

Esta conexión con nuestros antepasados hace que sus experiencias, sus memorias emocionales, sus creencias, tanto positivas como negativas, estén activas en nosotros. Por fidelidad a ellos, aunque de manera inconsciente, bien repetimos su historia o bien nos vamos al extremo contrario. Un ejemplo: si un antepasado fue estafado, su descendiente puede vivir lo mismo o ser este descendiente el que estafe.

Tenemos que entender que heredar estas experiencias y sus emociones no es para fastidiarnos y amargarnos la vida.

Realmente es un sistema de supervivencia. La finalidad de este traspaso de memoria emocional es que tener una segunda oportunidad para resolver lo que ellos no pudieron. También es su manera de protegernos para que no vivamos las mismas experiencias dramáticas. Por eso heredamos las creencias asociadas a sus experiencias de vida.

En el trabajo con las memorias transgeneracionales, no vamos a juzgar lo que ellos vivieron. Nuestra finalidad es hacer consciente lo que nos une a ellos para que no dirija nuestra vida y salir así del drama familiar.

“Cada uno de ellos y ellas, al igual que tú y que yo, hacemos lo que podemos con lo que sabemos y con los recursos y habilidades que tenemos”

Mientras el sufrimiento transgenracional no expresado de nuestros ancestros no se haga consciente seguirá pasando de generación en generación y se convertirá en el destino de los descendientes.

Problemas económicos (no ganar dinero a pesar de trabajar mucho, ganar dinero y perderlo, deudas continuas….), problemas sexuales, de infertilidad o conflictos de pareja pueden ser algunos de los síntomas que tenga la descendencia como forma de sacar a la luz el sufrimiento y el drama de los antepasados.

Siempre es interesante conocer la historia familiar del transgeneracional y saber con quienes estamos vinculados. Resulta especialmente necesario cuando tenemos problemas difíciles de solucionar o enfermedades o síntomas que persisten a pesar de haber intentado solucionarlo de diferentes maneras y en especial:

• Cuando tenemos un comportamiento o reacción emocional desproporcionada para el hecho vivido.
• Vivimos situaciones que parecen surrealistas y muchas veces repetitivas y nos llegamos a preguntar: ¿por qué me pasa esto a mí?

• Se repite una enfermedad concreta en varias generaciones (cuando dicen que es “genética”)

Si tienes la impresión de que no estás viviendo tú vida o, de alguna manera, sientes que el origen de tu problema puede estar en tu transgeneracional, no dudes en contactar con nosotras y te contaremos como podemos ayudarte a recuperar tu propio destino.

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